Escoleta infantil en Llubí

escoleta llubí
«Beta Architecture» ha publicado nuestra propuesta para el Concurso de ideas a nivel de anteproyeto y con intervención de jurado para la construcción de la nueva escoleta infantil en Llubí.

ver en «Beta Architecture. Unbuilt projects»

Escoleta llubí

Contexto: La parcela está situada en el borde del núcleo urbano, en una situación de límite con el contexto agrario que rodea Llubí. Este núcleo es una zona densa, de calles estrechas, llena de robustas casas campesinas y a veces masivas, de tonos ocres, y fachadas «quemadas» por el sol y de apariencia desgastada. No obstante las manzanas conformadas por esta zona de expansión del núcleo original de Llubí, albergan parcelas con fondos libres destinadas principalmente a huertos (las «casas factorías» aunaban parte de las tareas productivas con la función residencial, proveyendo zonas de cultivo el loteo del suelo). Hoy en día, y a pesar del declive poblacional transcurrido a lo largo del siglo XX, estos «huertos urbanos» se mantienen y conforman una imagen característica de Llubí, conservando el interior de las manzanas un carácter abierto y poroso frente a la impermeabilidad de la calle.
La calle Roca Llisa albergó usos residenciales junto con otros productivos o de almacenaje, algunos de ellos en desuso y otros abandonados, confiriéndole un carácter a la calle de cierta nostalgia. La falta de alineación a viario del edificio contiguo y algún otro, así como la presencia de parcelas libres a lo largo de la calle terminan por perfilar su fisionomía y crean el contexto para un nuevo uso dotacional público. La parcela presenta un desnivel de casi un metro con respecto a la rasante de la calle.

Programa: El programa solicitado es una escuela infantil hasta los tres años e insertado según normativa en una tipología de «edificación libre dentro de la parcela». La economía de medios para su realización, así como la lógica de su mantenimiento en el tiempo son otras de las premisas asumidas. Por normativa municipal será necesario contar con una reserva de plazas de aparcamiento dentro de la parcela. Además, el acondicionamiento ambiental habrá de ser una característica importante a considerar de principio.

Proyecto: Un espacio abierto, fluido. Un profundo corredor conduce hacia el espacio libre interior, al fondo de la parcela y conectando con una red de pequeños huertos. Un espacio que sirve de estancia y de paso (resolviendo así la necesidad de un espacio cubierto y protegido para el juego los días de lluvia). La forma en la que la luz tamiza este espacio (a través de un pequeño patio, un lucernario o ventanales) marca la entrada a las distintas dependencias y permite su uso vividero, una especie de sensación de habitar. Las aulas se resuelven en torno a pequeños patios particulares (fragmentos del huerto a modo de réplicas del original) y pareadas (agrupando 0-1 año con 1-2 años y por otro lado las aulas de 2-3 años) lo que permite un espacio versátil y con diversas posibilidades. Funcionalmente se organizan con un vestíbulo privado desde el que se accede además de al aula a los espacios de cambiadores, preparación de alimentos, zonas de descanso, aseos de niños, vestuarios y ducha (estos espacios tienen control visual del aula y permite a profesores y cuidadores desarrollar tareas simultáneas). Una formalización flexible para desarrollar un concepto pedagógico en constante evolución y cambio; la contemplación de la luz, el control de la temperatura y el ruido exterior para no influir negativamente en el rendimiento. (Se potencia la posibilidad de libertad de movimiento y un contexto menos rígido así como la posibilidad de aprendizaje del ambiente que los rodea). El aula de usos múltiple y el comedor se vinculan al espacio libre de parcela y zona de juegos al aire libre, consiguiendo así una diferenciación de espacios e intensidades de uso (creemos que esta disposición ayuda a un uso complementario del centro más allá de la actividad diaria y habitual, posibilitando su uso como centro cívico). El despacho y sala de reunión se vinculan a la zona de entrada y formalizan el frente construido de parcela, alineado a vial. Anexo a este cuerpo está una zona cubierta y abierta de espera y que toma la alineación de la nave adyacente, creando un espacio de antesala y encuentro de padres y niños que se convierte en un pequeño incidente en la monotonía de la calle.

«Parece razonable que un arquitecto produzca cosas simples y sencillas. Y justamente eso quería yo. Afrontar un problema y responder con algo sencillo y honesto. Preferiblemente desde el anonimato. Esta era la motivación más personal». (Peter Zumthor a propósito de la casa Luzi).

Este preámbulo está ocupado en parte por la reserva obligada de aparcamientos (1 plaza por cada 100 m²), conllevando ello un vado que liberará de vehículos estacionados en la inmediación; la disposición del aparcamiento de esta manera repercute de la menor manera sobre la ocupación de suelo de la parcela y posibilita por contra un uso modelable en el tiempo.
Otra cuestión tiene que ver más con la construcción, con la simplicidad constructiva de la técnica/tradición del muro. El carácter del espacio depende además de cómo están hechas las cosas:

«Una y otra vez se hace presente la sensualidad de lo material, de la materia: cómo se la siente al tacto, a la vista; si es mate o brillante, cómo huele; si es dura, blanda, elástica, fría o caliente, lisa o rugosa; cuáles son sus colores, qué estructuras exhibe en su superficie»(Manfred Sack).