PUENTE SOBRE EL RÍO GUADALETE

concurso de ideas para la construcción de un puente sobre el río Guadalete. El Puerto de Santa María. Cádiz. 2009.
puente sobre el río guadalete. el puerto de santa maría
puente sobre el río guadalete. el puerto de santa maría

El lugar donde se pretende construir el nuevo puente sobre el río Guadalete trata de conectar la Avenida de la Bajamar con la margen izquierda del río (donde se localizará una “operación terciario-comercial prevista en el área portuaria y localizada entre la zona pesquera y el puente de San Leandro”). De esta forma el nuevo puente se erige como elemento de nexo necesario entre la ciudad histórica y este nuevo centro comercial abierto (que dotado de un aparcamiento disuasorio canalizará el flujo peatonal de entrada al casco histórico desde la periferia).

Así mismo, esta actuación junto con la cabecera del aparcamiento de Pozos Dulce y Plaza de toros dotará de una nueva libertad a la Ribera urbana del río Guadalete, eliminando la primacía del automóvil sobre el peatón, el ciclista o los transportes colectivos. Una operación que fomente las actividades de esparcimiento e intercambio sobre este ámbito.

El marco en el que se encuadra esta intervención propone que el nuevo puente sea parte integrante de lo que será el futuro Parque de la Ribera del Guadalete (“por ello en su diseño debe prevalecer la idea de puente urbano como espacio público en sí mismo e integrado en la actuación general del parque”).

El entorno en el que se sitúa el puente en su margen urbana es actualmente un aparcamiento en superficie que rompe la débil continuidad del espacio público de la Ribera. Por ello, esta nueva operación urbana sirve de catalizador de las estrategias desplegadas para favorecer la cohesión del espacio libre y librarlo de la hegemonía de los sistemas de aparcamiento sobre las áreas de centralidad así como potenciar la configuración de un espacio urbano cómodo y accesible.

Esta temática es la que se constituye en leitmotiv del proyecto, las posibilidades de uso como espacio libre, desde su vertebración con la ciudad y su comprensión desde el paisaje, una estrategia en la que su influencia trasciende de sus límites físicos para desdibujarse sobre el futuro Parque de la Ribera del Guadalete.

De esta forma, se propone una continuidad espacial, creando una relación fluida entre los espacios libres, abiertos y habitados. El puente se constituye en lugar de encuentro de personas, de espacios, de actividades, una estrategia que ha de trascender al resto de actuaciones del futuro parque (el acto de conectar-unir es un acto creativo de habitar un lugar).

puente sobre el río guadalete. el puerto de santa maría
puente sobre el río guadalete. el puerto de santa maría

El puente, propiamente dicho, es además, el último punto de conexión entre las dos orillas antes de la desembocadura, hecho este que remarca el compromiso que reclama el lugar, tanto como marco de entrada marítima, como construcción de una infraestructura tecnológica.

La memoria del lugar nos remite a los restos que quedaron varados para siempre en las orillas del río, deglutidos por el paso constante del cauce fluvial y desprovistos de su piel para quedar reducidos a su exoesqueleto (“el mediterráneo es un lugar de soportes eternos y techumbres caducas”).

Así nuestra propuesta entiende el puente como esos objetos varados en la desembocadura del río, no perteneciendo a la ciudad, sino formando parte del paisaje.

puente sobre el río guadalete. el puerto de santa maría
puente sobre el río guadalete. el puerto de santa maría

Desvelada la trama argumental, pasamos a explicar cómo se ha materializado la idea:

La estructura se ha utilizado como elemento definitorio de la forma, constituyendo un esquema de tres vanos de distintas luces (uno de ellos levadizo) salvados por un sistema primario de arcos que sostienen mediante cables el tablero. Estos arcos son el exoesqueleto visible de la nueva estructura, cuyas curvaturas presiden la llanura del territorio, destacándose en el nuevo área de centralidad, creando una nueva referencia para la comunidad.

El diseño ha propiciado que la franja central del tablero esté un poco elevada, permitiendo alojar un mirador con bancos. Este nivel del puente va cubierto con una lámina textil que proporcionará una sombra o techumbre a modo de refugio y que cualificará de un modo distinto el tránsito-estancia del trayecto.

Se ha propuesto un tablero continuo (14 metros de ancho mínimo) de sección delgada que permite un tránsito continuo con una pendiente mínima (del 8% para eliminar barreras arquitectónicas) y que permite el paso de embarcaciones ligeras con una altura libre mínima de tres metros. El vano levadizo (tal y como se propone desde la convocatoria) está situado en la margen izquierda.

La materialidad del pavimento se mimetiza con las texturas del espacio público que sirve de vestíbulo al puente, favoreciendo la continuidad e integración con los espacios urbanos de las dos orillas. No se segrega la pavimentación apta para la circulación de vehículos de la del resto, aunque sí se dota de una materialidad distinta a este ámbito.

La estructura de cables que soportan el tablero se funde con una celosía que tamiza la visión tanto del Puerto de Santa María como del, ya no tan distante, océano Atlántico.

Formalmente el puente se compone de tres vanos que dejan una luz (desde la margen izquierda a la derecha) de 22m, 26.20m y 48.25m y salvan una altura mínima (con cota de PMVE) en el vano más largo de tres metros.

puente sobre el río guadalete. el puerto de santa maría
puente sobre el río guadalete. el puerto de santa maría